Mi gran enemigo: el mosquito

Uno de los grandes enemigos veraniegos, aparte del sol, es el mosquito. Su presencia, además de resultar algo irritante, especialmente durante las noches, puede ocasionar grandes perjuicios, que pueden ir desde las clásicas pero molestas picaduras leves hasta la transmisión de enfermedades, muchas de ellas mortales.

A la hora de lidiar con los mosquitos, al igual que con cualquier problema, lo mejor es evitarlos. Una forma de lograrlo es mediante la instalación de mosquiteras en las ventanas del hogar que impidan su entrada en el mismo. Igualmente son de gran utilidad las mosquiteras de cama.

Otro factor a tener en cuenta es la presencia de aguas estancadas, como por ejemplo las de las piscinas, lugares donde las hembras de mosquito depositan sus huevos, puesto que las larvas que de ellos surgen necesitan de un medio con agua en esta fase. Por ello deben evitarse los depósitos exteriores en los que pueda acumularse agua de lluvia como botellas o latas, entre otros, cambiar con frecuencia el agua los bebederos de animales, mantener las piscinas limpias y con un nivel de cloro adecuado, controlar el agua de las macetas, limpiar regularmente techos y otros puntos en los que pueda acumularse agua, etc.

También es importante el uso de repelentes de mosquitos, con mayor motivo si viajamos a países tropicales donde enfermedades como la Malaria, la Fiebre Amarilla y el Dengue entre otras son endémicas.

Existen múltiples repelentes en el mercado, que podemos dividir en naturales y químicos. Ahora que lo natural está en boca de todos y cobra cada día más popularidad es importante tener en cuenta los primeros.

Entre ellos se encuentran las pulseras/tobilleras, con diseños cada día más originales, incluso para los más pequeños de la casa y los parches. Éstos van provistos normalmente de citronella o limón. No obstante y aunque su efectividad es menor que la de los repelentes químicos, entre ellos se encuentra también el Citriodiol, del que existen estudios en que se ha demostrado que puede ser tan efectivo como el DEET.

Sin embargo, debemos tener en cuenta para qué van a usarse estos repelentes, puesto que no es lo mismo su empleo si se va a permanecer, por ejemplo, en España que para un viaje a países más exóticos. En caso de un viaje a un lugar tropical, entra en juego no la elección entre repelentes naturales y químicos, sino la necesidad de usar estos últimos por su mayor eficacia. En este grupo nos encontramos, entre otros, con el DEET (N,N-dietil-m-toluamida), el IR3535 y el Icaridin, eficaces contra mosquitos, moscas y garrapatas. No obstante, de ellos el más eficaz es el DEET, presente en la formulación de gran parte de los repelentes del mercado.

Pero si a pesar de todas estas precauciones, sufrimos la picadura de uno de estos insectos, ¿qué debemos hacer?

En caso de que ésta se produzca en un país tropical es imprescindible recibir asistencia médica, debido a las consecuencias no tanto de la picadura sino de la posible transmisión de enfermedades. En cuanto a cómo tratar esa molesta picadura es importante lavarla con agua fría y aplicar hielo para bajar la inflamación, así como reducir el picor con preparados a base de antihistamínicos, calamina u otros calmantes. En algunos casos puede ser necesaria también la administración de un antihistamínico oral.

Dicho todo ello, esperamos haberos aclarado las precauciones a tener en cuenta este verano. Debido a la cantidad de información existente acerca del tema, en esta entrada os hemos ofrecido un resumen de la misma, por lo que si queréis conocer más detalles podéis pasaros por la Farmacia Coello 74, donde os asesoraremos.

¡Saludos y disfrutad de un verano sin picaduras!

Sara Jiménez

(Imagen cedida por www.freepik.es)